Al igual que sus pueblos mágicos, la
gastronomía mexicana también se distingue por su historia y las hermosas leyendas
que se entretejen a su alrededor.
La segunda
historia nos relata que este platillo fue inventado por las monjas agustinas
del convento de Santa Mónica en Puebla, para celebrar tanto la reciente
Independencia de México, como el santo del nuevo emperador, Agustín de
Iturbide. Aprovechando los productos de temporada como la granada y la nuez de
Castilla, las monjas agustinas del convento de Santa Mónica, prepararon un plato
que llevara los colores de la nueva bandera de los insurgentes: verde, blanco y
rojo, (colores que actualmente muestra y engalana nuestro más hermoso símbolo patrio,
la Bandera de México).
La receta de los chiles en
nogada tal y como los conocemos no aparece en documentos escritos sino hasta la
segunda mitad del siglo XIX. Ejemplo de ello es
el documento poblano titulado “Formulario de la cocina mexicana” escrito que describe
elementos característicos de este platillo: el picadillo incluye frutas como la manzana y
el durazno, mientras que la decoración consiste en granada y hojas de perejil,
mismos ingredientes que utilizaran en 1714 las monjas agustinas. Es así como este
exquisito platillo se convirtió en el platillo típico de las Fiestas Patrias,
celebradas en la ciudad de México en el mes de septiembre.
Esperamos que esta historia te inspire y recuerden que lo más importante es que DISFRUTEN, RIAN, VIVAN Y AMEN CADA PASO DE SU CAMINO AL ALTAR.
Los chiles en nogada son uno de los
platillos más representativos, coloridos y sabrosos de la gastronomía no solo
poblana, si no de la cultura culinaria de México.
Les cuento un poco de la historia romántica
de los chiles en nogada.
Artemio de
Valle-Arizpe, detalla que en el ejército trigarante existían tres soldados
cuyas novias vivían en Puebla. Emocionadas por la Independencia y por tener de
vuelta a sus enamorados, decidieron crear un platillo para engalanarlos. Cada
una eligió un ingrediente que representara uno de los colores del ejército trigarante
y sin recurrir a ningún recetario. Le rezaron a la virgen del Rosario y a San
Pascual Bailón para que las iluminara, y se dispusieron a cocinar, logrando un
platillo muy colorido.
La segunda
historia nos relata que este platillo fue inventado por las monjas agustinas
del convento de Santa Mónica en Puebla, para celebrar tanto la reciente
Independencia de México, como el santo del nuevo emperador, Agustín de
Iturbide. Aprovechando los productos de temporada como la granada y la nuez de
Castilla, las monjas agustinas del convento de Santa Mónica, prepararon un plato
que llevara los colores de la nueva bandera de los insurgentes: verde, blanco y
rojo, (colores que actualmente muestra y engalana nuestro más hermoso símbolo patrio,
la Bandera de México).
¿Con que historia te quedas? Romántica,
histórica, en fin, lo importante es que conozcas este platillo típico de la
cultura culinaria de México y puedas servirlo en tu boda, nada más hermoso que
su colorido que dará ese toque de impacto visual a tus invitados, y al probarlo
la explosión de sabor que provocara en tus invitados será algo que recordaran
el resto de sus vidas.
Cásate en México, Vive su cultura,
tradiciones y gastronomía
Esperamos que esta historia te inspire y recuerden que lo más importante es que DISFRUTEN, RIAN, VIVAN Y AMEN CADA PASO DE SU CAMINO AL ALTAR.
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